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La Universidad de Murcia coordina la investigación del proyecto From Bubble donde se evaluará la estimulación que produce el arte contemporáneo en 120 personas con deterioro cognitivo
El cerebro desde el Arte es una intervención artística desarrollada en la Fundación Poncemar y la Universidad de Murcia (UMU) en la que se estudia cómo las personas con deterioro cognitivo interactúan y trabajan con obras contemporáneas a partir del concepto del proyecto From Bubble, una propuesta del artista español Daniel Bagnon que crea la idea de bubble - burbuja -, como la unidad mínima de un cerebro que está perdiendo la capacidad de conectar su red neuronal es capaz de analizar y procesar.
Esta investigación, coordinada por la profesora Catalina Guerrero Romera, del Departamento de Teoría e Historia de la Educación de la UMU, busca explorar la relación entre el arte y el cerebro para evidencian los beneficios de la creación y de la experiencia artística en un envejecimiento saludable y en el bienestar emocional, social y cognitivo de las personas. El estudio se ha realizado en colaboración con la profesora del grado de Terapia Ocupacional Laura Delgado Lobete y ha contado con un número importante de voluntarios universitarios.
El arte como herramienta para mejorar la calidad de vida
120 participantes que provenían de diversos centros de día de Lorca realizaron una creación plástica sobre el concepto de Bubble, con base de pintura acrílica de cuatro colores. El resultado de esta intervención artística se va a evaluar a través de una escala que tiene como finalidad conocer los beneficios de trabajar con el arte en personas mayores en cuatro dimensiones centrales de la calidad de vida: Salud-bienestar físico, Bienestar emocional, Participación social y Desarrollo personal, porque se ha demostrado que trabajar a través del arte permite ejercitar la mente, produciendo una huella cerebral, cognitiva y emocional.
“Hay que destacar el componente investigativo que tiene este proyecto respaldado por la Universidad de Murcia. Son muchos los estudios que evidencian los beneficios de la creación y de la experiencia artística para fomentar un envejecimiento más activo y saludable”, afirma la coordinadora del estudio, Catalina Guerrero, quien ha dejado claro el hecho de que estas acciones tienen un fuerte componente de investigación e innovación que trata de dar respuesta a los retos del envejecimiento y así avanzar en nuevos modelos y metodologías que ayuden en los tratamientos y en la intervención.
Los participantes del estudio provienen de los Centros de Día de la Fundación Poncemar, de las residencias de la ciudad de Lorca, Residencia San Diego, Residencia Caser-Alameda, Residencia Domingo Sastre del IMAS, y de las Asociaciones de Alzheimer Lorca y de Parkinson.
