Centro de Estudios Universitario en Educación Médica

• Curso de formación de pacientes estandarizados (ya realizado):

   Uno de los objetivos fundamentales del proceso de Bolonia, iniciado en 1999 y con implantación completa en 2010, es el reconocimiento común de las titulaciones en el llamado Espacio Europeo de Enseñanza Superior. La idea fundamental en el nuevo sistema de Bolonia es imprimir un cambio en la forma en la que tradicionalmente se ha estudiado la medicina, desde un modelo basado en la enseñanza hacia otro basado en el aprendizaje. Para lograrlo, pretendemos centrarnos en la formación por competencias para mejorar la formación de los estudiantes, actualmente basada en conocimientos, hacia la formación en habilidades, aptitudes y valores. Si las competencias son el objetivo a alcanzar, es esencial utlizar métodos que permitan su evaluación. Ya no deberíamos medir sólo los conocimientos teóricos, ni pensar que sólo con conceder un mayor protagonismo a las clases prácticas todo está solucionado. Además, debemos evaluar la adquisición real de esas competencias, que en el caso de la competencia clínica sólo puede ponerse de manifiesto con mecanismos que se pongan en evidencia en un ambiente lo más cercano posible al real. No se trata de examinar a los alumnos con pacientes reales sino de utilizar metodologías ampliamente usadas en otros países, y en algunas partes de nuestro país, desde hace décadas que de forma muy eficaz consiguen esos objetivos. La aplicación, desde 2013, en nuestra Facultad de una prueba de evaluación de la competencia clínica y de comunicación tipo ECOE ha puesto de manifiesto el interés y entusiasmo de muchos profesores por aumentar el desarrollo de este tipo de métodos para su uso como herramienta de evaluación. Por su parte, la buena acogida dispensada por los estudiantes de Medicina a dicha prueba hace necesario plantearse el uso de esas técnicas también en el proceso de enseñanza. El viejo sistema de aprendizaje por inmersión directa en la clínica, en la mayoría de los casos sin disponer de unos objetivos de aprendizaje que el alumno pueda seguir, ha sido rechazado continuamente por los estudiantes y cada vez más, por sus profesores. En este documento presentamos un proyecto de formación de pacientes estandarizados que sirva de ayuda al proceso de evaluación de la competencia clínica en las ECOEs a realizar obligatoriamente en el nuevo Grado. En segundo lugar, y una vez analizada la bondad de la actividad, proponemos utilizar esta figura como método de ayuda en la formación de los estudiantes de Medicina.

¿Qué es un paciente estandarizado?
   El paciente estandarizado (PE), antes llamado paciente programado, es una persona entrenada para representar un determinado proceso médico de manera estandarizada con objetivos evaluativos o docentes. Es decir, aquella persona que ha sido entrenada cuidadosamente para representar un paciente real con historia clínica y exploración física cuya simulación no puede ser detectada por un clínico habilidoso, y de forma estandarizada, es decir, de forma invariable ante distintas situaciones o profesionales. En la prueba ECOE realizada en junio de 2014 utilizamos por primera vez PE gracias a un convenio docente con la Escuela Superior de Arte Dramático de Murcia (ESAD). Esto permitió que seis estudiantes del último curso de Grado en Arte Dramático realizaran parte de sus prácticas de último año de carrera con nosotros. A tal fin, fueron entrenados cuidadosamente por los profesores responsables de los casos y debidamente caracterizados realizaron su papel como PE en dicha prueba de forma muy satisfactoria. Para la prueba que estamos preparando para junio de 2015, el número de casos que van a precisar de PE es mayor y no basta con tener a un actor o actriz que represente sin más un caso clínico, sino que esta representación debe repetirse de forma profesional unas 20 veces en el transcurso de la prueba, sin variaciones sensibles entre unos estudiantes y otros, lo que afectaría a su fiabilidad. El plan que presentamos prevé reclutar a individuos confiables y flexibles, de entre 20 a 60 años,  que puedan actuar como PE y que se comprometan a formarse para llegar a actuar como tales. Para ello deberán:

• Memorizar el caso clínico que se le asigne manteniendo un alto nivel de autenticidad, haciendo la experiencia "real" para los estudiantes.
• Recordar cada encuentro con un examinando para poder anotar con precisión los criterios de una lista de verificación preparada al efecto.
• Repetir de forma profesional el caso las veces necesarias manteniendo su carácter, independientemente de lo que el estudiante pueda decir o hacer.