El grupo de investigación BIOVETMED & SPORTSCI junto con el departamento de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte "Mare Nostrum" de la UMU han publicado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health una investigación sobre las actuales recomendaciones y mejores prácticas para el fútbol no profesional en la vuelta al juego tras el bloqueo por la COVID-19.

Los jugadores no profesionales han visto muy limitada su actividad con la actual situación; además, debido a la naturaleza de este deporte, el contacto entre compañeros se hace inevitable. Por eso resulta esencial organizar adecuadamente el calendario de pretemporada, especialmente para el fútbol no profesional, ya que, en algunas Comunidades, a diferencia de las ligas profesionales y semiprofesionales, todavía no han reiniciado sus actividades de entrenamiento/competición, como en la Región de Murcia.

Recomendaciones multidisciplinares

Esta investigación se ha marcado como objetivo realizar un marco teórico que recopile sugerencias, mejores prácticas y diseños de entrenamiento para adaptarse a las circunstancias, tanto de los deportistas como las exigidas por el coronavirus para garantizar las medidas de seguridad.

Las pautas se han agrupado en tres: gestión de la carga de entrenamiento, recomendaciones médicas, y consideraciones de recuperación. La evaluación física personalizada en los entrenamientos y tras los posibles confinamientos de los jugadores y el trabajo multidisciplinar (entrenadores, psicólogos, federaciones, etc.) son dos elementos clave para garantizar la salud de los atletas. Una correcta higiene del sueño, una alimentación adecuada y la organización de un calendario de entrenamiento basado en la restauración de las capacidades físicas y de recuperación, resultan ser los puntos más importantes.

Es importante poner el foco en la planificación de las actividades a la hora de retomar los entrenamientos con intensidad, para evitar la incidencia de lesiones. Debido al detrimento de las capacidades de los deportistas tras el parón, los entrenos deberán realizarse de manera progresiva, intentando mantener siempre al máximo la capacidad de concentración de los jugadores para lograr una progresión más eficaz y segura.

En lo relativo a la COVID-19 y el ejercicio de alta intensidad, se ha encontrado una correlación entre las fuertes cargas de entrenamiento y la inmunoglobulina A. Este anticuerpo es el principal factor inmune de las infecciones del tracto respiratorio superior (URTI) por virus o bacterias. La URTI más conocida actualmente es el coronavirus y, tal y como asegura José Pino Ortega,  “el ejercicio de alta intensidad desciende los niveles inmunoglobulina A, haciendo a un organismo más vulnerable al contagio de virus y bacterias desde las vías respiratorias altas (nariz y boca); por eso, recomendamos controlar la carga de entrenamiento.”

Garantizar la salud de los deportistas durante la situación actual es doblemente importante: por un lado, es fundamental mantener la buena forma física de los futbolistas así como respetar la naturaleza de este deporte; pero, además, en términos de salud pública y personal, se debe prevenir la propagación del coronavirus y actuar adecuadamente para una buena recuperación tras la enfermedad.

Más información:

• DOI: https://www.mdpi.com/1660-4601/18/2/568/htm
• Los autores buscaron en dos bases de datos electrónicas (PubMed, Web of Science) para extraer estudios publicados antes del 15 de septiembre de 2020.
• Publicación de la investigación: International Journal of Environmental Research and Public Health, 7 enero 2021