Campaña 2005

La última intervención arqueológica comienza en el verano de 2005 y a finales de 2007 aún no está cerrada. Sus resultados, en cierta parte lógicos, no han dejado de ser una sorpresa que han tenido como primera consecuencia de un proyecto de musealización integral del balneario y la creación de un museo arqueológico adscrito al sistema regional de museos y con todos los servicios de tratamiento, custodia y gestión de materiales y de investigación que requiere un museo moderno.

Las obras de un aparcamiento subterráneo a espaldas del Hotel León (entre éste, el monte, las piscinas y la huerta, en el lugar en el que estaban la antigua fonda del águila y los almacenes y talleres del balneario), comenzaron con una supervisión arqueológica ya uqe en las obras de la piscina inmediata no se había producido ningún hallazgo, y terminaron a los pocos días con el comienzo de una excavación al detectarse los primeros restos: un horno de teja y ladrillo y los restos de una almazara romana.

La ampliación de los trabajos arqueológicos a zonas no afectadas por el aparcamiento puso al descubierto lo que podría ser una mansio, un conjunto de frescos romanos y un malecón de protección ante las inundaciones.

El interés científico de los restos que estaban apareciendo era innegable y el valor patrimonial se intuía. Esto motivó, de acuerdo con la Dirección General de Cultura y la dirección del balneario que las excavaciones se fueran ampliando a lugares que no estaban afectados por la obra moderna. El resultado ha sido abrir un área de excavación arqueológica de más de 3000 metros cuadrados, en la que se ha hallado un complejo bastante completo de las instalaciones de servicios del balneario romano, tanto las hosteleras como las industriales.