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Revista de estudios filológicos
Nº30 Enero 2016 - ISSN 1577-6921
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“Un planeta unido por signos”, por  Susana Pérez de Pablos, EL PAÍS, 24 de junio de 2015

 

http://politica.elpais.com/politica/2015/06/24/actualidad/1435181660_693552.h

 

 

Creado el primer diccionario multinacional de lenguas de signos, que traduce en vídeos más de 375.000 términos de 25 países

 

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Un grupo de trabajo, formado por personas de diferentes países, que elabora el proyecto de diccionario 'Spread the Sign'. / SANTI BURGOS

 

Café es coffee en inglés; kaffee, en alemán; kawa, en polaco; kofe, en ruso; koojii, en japonés; y kahvi, en finés.

Café, en la lengua de signos de España, se dice haciendo el gesto de coger una taza imaginaria con la mano izquierda y remover la cucharilla en ella con la derecha. En la lengua de signos de Alemania se signa cogiendo la taza ficticia con dos dedos y llevándola a la boca.

¿Quién discutiría hoy por hoy que el aprendizaje de idiomas es vital para moverse por países y continentes, para comunicarse, para ser ciudadanos integrados en el mundo global? Sin embargo, las personas que usan una lengua de signos no tienen acceso a ello, al menos hasta ahora. No existe un lenguaje de signos universal. Es más, ni siquiera existe uno para cada lengua oral. Hay uno diferente por país.

Hoy se presenta el primer diccionario multinacional de lenguas de signos en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Un inmenso proyecto, denominado Spread The Sign, promovido y financiado por el programa Leonardo de la UE, y en el que participan 25 países de todo el mundo. Lo han elaborado decenas de profesionales, cuyo seguimiento y evaluación ha realizado la Universidad de Örebro, en Suecia.

“Este diccionario permite, por un lado, que los profesionales de la lengua de signos puedan moverse por el mundo con una herramienta pedagógica solvente y, por otro, el autoaprendizaje de estas lenguas y la traducción de los signos por cualquier persona”, explica Ricardo Moreno Rodríguez, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos y director de su Unidad de Atención a la Discapacidad. En ese centro estudian 30 personas con discapacidad auditiva. Dos de ellas usan la lengua de signos. Se calcula que en España hay alrededor de un millón de personas con deficiencias auditivas, de los cuales unas 70.000 recurren a la lengua de signos, pero este dato aumenta bastante si se tiene en cuenta su entorno y los profesionales dedicados a ella.

Spread The Sign, que está disponible en Internet y en una app gratuita (para iPhone y Android), reúne la traducción en forma de vídeo de 15.000 signos, conceptos y frases de la lengua de signos de cada nación participante, es decir, 375.000 entradas. A estas hay que añadir las de otras lenguas oficiales de los países.

“El proyecto nació en 2006 para ayudar a alumnos de FP y ha ido creciendo hasta llegar a ser una gran herramienta”, recuerda José María Criado, gerente de Servicios Integrales de Lengua de Signos (SIL), la empresa encargada de realizar la traducción en España. “Ha trabajado en ello un equipo apoyado por 10 personas sordas voluntarias de distintos ámbitos y edades y con la supervisión del Centro de Normalización Lingüística de la Lengua de Signos Española (CNLSE), explica.

La importancia de esta herramienta va más allá de la traducción, apunta la coordinadora del proyecto Spread The Sign en España, Luisa Navarro: “Empezó planteándose como algo más modesto y ha acabado siendo como el diccionario de Lázaro Carreter. Ayudará a la supervivencia de las lenguas de signos, a su asentamiento más allá de su transmisión entre personas, y a afrontar desafíos, como la creación de un sistema de registro universal”.