La inmensa mayoría de los materiales arqueológicos exhumados corresponden, en su inmensa mayoría, a cerámicas, adscribibles a las diferentes fases de ocupación del poblado.
Las que en mayor número se han documentado a lo largo de las diferentes campañas de excavación han sido las ibéricas, de gran calidad y originalidad técnica y decorativa, y que ha permitido la realización con las formas y decoraciones de las cerámicas de Molinicos.
A las cerámicas ibéricas hemos de añadir los grandes pithoi que se han atestiguado en la propia ladera del cerro y que documenta a través de su tipología y ajuares la ocupación eneolítica del lugar. Además, hemos de añadir las cerámicas de ascendencia hallstáttica, que crean un fuerte contraste técnico y tipológico con los conjuntos de cerámicas ibéricas. Son generalmente grandes vasos a mano, de superficie bruñida, con base plana con o sin talón.